~Capitulo 14-.
Se dio la vuelta y se fue
por donde había venido, yo seguía atónita, ¿Me había amenazado aquella poca
cosa? Dios. Me giré hacía Pablo y le sonreí, me daba igual lo que me dijera aquella
chica, yo era feliz y era lo que contaba. Bailamos un rato más y me fui al
baño, allí me encontré con Thais vomitando en taza del wáter, ¿Qué hacía allí?,
fui corriendo donde ella y la ayudé a levantarse:
-Thais, ¿Qué te pasa?
-Nada tía, que me
encuentro fatal – se volvió a arrodillar y le sujeté el pelo, que situación aquella
– me he tomado una pastilla que me ha dado uno y todo me da vueltas, me duele
la cabeza y no me acuerdo de nada. Ayúdame por favor – volvió a girarse -.
-¡JODER THAIS! ERES
IMBÉCIL ¿CÓMO SE TE OCURRE TOMARTE UNA PASTILLA?¿EN QUE COÑO ESTABAS PENSANDO?
-Joder no me grites, lo
siento ¿vale? – me dijo con lagrimas en los ojos -, quería probarla me había
dicho que no era mala que solo me sentiría como en una nube, y ¡YOQUESÉ! Llévame
a casa, por favor.
-Esta bien, vamos.
La ayudé a levantarse y
la llevé al lavabo, se limpió la cara con agua y le puse el vestido bien, le
puse una mano por la cintura y la suya por mis hombros, como pudimos salimos de
aquel baño, la senté en unos sofás que habían y le dije que no se moviera, fui a
buscar a Óscar para que la llevara a casa, avise a Pablo y le dije que en un
poco volvía, que se esperara allí. Fuimos donde Thais y entre Òscar y yo la sacamos
como pudimos de aquel lugar, la metimos en el coche, abrimos la capota para que
le diera un poco el aire, me senté detrás con ella y Òscar iba a 200 km/h por
la carretera, llegamos a su casa y no había nadie, sus padres estaban en una
casita en la montaña aquel fin de semana. La subimos a su habitación y la
cambiamos como pudimos, la tumbamos en la cama y cerramos la luz, bajamos las
escaleras y cerramos la puerta de la casa. Me daba miedo dejarla allí sola esa
noche. Caminamos al coche y me subí al lado suyo:
-Gracias Óscar por el
favor.
-De nada preciosa, ya
sabes, lo que sea, al tito Òsquita.
-Jajaja vale, pues
Òsquita, ¿me llevas a la discoteca?.
-Ni lo dudes preciosa.
-Jajaja.
Hablamos mientras llegábamos
al local, entramos y allí estaba Pablo con ¿¡PENÉLOPE?! ¿¡ QUÉ ESTABA
PASANDO!?, entré justo en el momento en que se estaban besando, Òscar también
lo vio. Salí corriendo y llorando, el me siguió hasta la parte trasera del
local, me cogió el brazo y me empujó contra su pecho, me abrazó con todas sus
fuerzas durante infinitos minutos, no dijimos ni una palabra, solo se oían mis
llantos y la música de dentro. Me calmé un poco y me aparté de su camisa, se la
había puesto perdida de rímel y lagrimas. Me ofreció un pañuelo y me volvió a
abrazar. Nos fuimos de allí y me ofreció llevarme a casa, se lo negué, quería
entrar, bailar, perder el control, no iba a amargarme la noche. Entramos dentro
y Pablo me busco, le levanté el dedo del medio y le mandé a la mierda, no
entendía nada y le dije que esa noche, me olvidará. Me fui al centro de la
pista y me puse a bailar con todo aquel que se acercara. Pablo se acercó a
hablar con Òscar y se lo contó, pero me daba igual, esa noche era libre para
hacer lo que quisiera, y el, que se fuera con Penélope, que yo ya me iría con
otro. Bailé toda la noche y Pablo intentaba hablar con migo por todos los
medios, no lo consiguió. Me fui con mis amigas y hasta las 12 de la mañana no
llegué a casa con los tacones en la mano. Cerré la puerta despacio, por suerte
Sara seguía durmiendo y mi padre se había ido ha cerrar un trato con unos
clientes. Subí a mi habitación y me quité el vestido, lo puse a lavar y me
recogí el pelo, bajé a la cocina a comer algo y llamarón al timbre, abrí, era
Pablo, estaba a punto de cerrarle en las narices cuando puse el pie y lo
impidió. Entró y me fui a la cocina y seguí preparándome el sándwich con el que
estaba. Me cogió del brazo y me miró a los ojos, a eso si que no me podía
resistir, sus ojos eran mi debilidad, el lo sabía, lo miré y todo enfado
desapareció de mi rostro:
-Ya me ha contado Òscar
todo…
-Sí, genial, ahora lárgate.
-No, no me voy a ir hasta
que me escuches.
-Te escucho, pero luego
te vas.
-Vale. Mira, cuando tú
llegaste Penélope se había dado cuenta de que no estabas y aprovecho para
volver a hablar conmigo, me volvió a pedir salir y se lo negué como de
costumbre. Total, me besó y yo no me di cuenta y la aparté enseguida, pero tú
eso ya no lo viste.
-¿Y me lo tengo que creer?¿Por
qué?
-¿No confías en mi?...
-Sí, pero después de
esto, ¿Qué quieres que piense?
-Pues lo que te digo, la
verdad.
-No sé que creer, os
estabais besando ¡JODER!
-No, me estaba besando
ella, yo no siento NADA por ella ¿Cómo te lo digo para que se te meta en la
cabeza?
-…
-Eres increíble Sabrina, increíble.
Te amo ¿no lo entiendes?
-Pero… ella… tú.. Joder.
-¿Me quieres?
-¿Otra vez la misma
pregunta? No, no te quiero, te amo, eres todo joder, TODO.
-Entonces, créeme. –me besó
y el mundo se paró – por favor.
-Me lo tengo que pensar,
ahora por favor vete, esto me ha dolido.
-Pff… lo siento pequeña,
de verdad.
Salió de la casa y yo me
quedé mirando la pared unos minutos hasta que reaccioné, seguí preparándome el sándwich,
lo puse en un plato y me senté en la mesa a comérmelo ¡que hambre! Limpié la
mesa y puse el plato en agua , me subí al cuarto de baño, me desnudé y encendí
el agua caliente, necesitaba una ducha calentita para relajarme de aquella
noche, me metí y en agua empezó a recorrerme el cuerpo, me puse champú y
mascarilla, me limpié un poco el cuerpo con gel y salí, cogí 2 toallas, una
para la cabeza y otra para el cuerpo, me sequé un poco y me puse crema, me miré
al espejo y sonreí, no quería que nadie se diera cuenta de que estaba mal,
apagué las luces y me subí las escaleras hacia mi habitación, abrí el armario y
cogí un pantalón de chándal azul y una camiseta de tirantes básica negra, dejé
las toallas sobre un puf que tenía y me recogí el pelo, que bien sentaba una
ducha después de aquella noche. Me tumbé en la cama, quería dormir ya, estaba
rebentadisima, me puse los cascos y en el móvil empezó a sonar la canción de ‘’Lo siento si te fallé’’ de Xriz, Young killer y CHK. Que justa que era… intenté no pensar en el
tema demasiado rato pero fue imposible, sin saber como ya eran las 2, cerré los
ojos y me dormí.
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